Los mitos y creencias alrededor de los alimentos congelados son temas polémicos que provocan diversidad de opiniones. Ya sabemos que el frío es una forma fácil de conservar los alimentos pero,¿pierden estos sus nutrientes? ¿sus propiedades se mantienen intactas? A continuación resolveremos dudas típicas que nos pueden surgir a diario.
Cabe destacar la diferencia existente entre el congelado ``casero´´ y el congelado industrial. Este último somete a los productos hasta temperaturas de -40 º C lo que implica que los microorganismos existentes dejen de reproducirse mucho antes de lo que lo harían en un congelador como el que todos tenemos en casa. Además, la velocidad de congelación es mucho mayor en un congelador industrial provocando que los cristales de hielo que se forman sean más pequeños y que por lo tanto dañen mucho menos la textura del alimento.
Trataremos ahora las diversas afirmaciones que todos escuchamos alguna vez:
- Los alimentos congelados mantienen las mismas condiciones que los frescos siempre y cuando se congelen en las CONDICIONES ADECUADAS.
- Se conservarán más NUTRIENTES cuanto antes se congelen.
- El frío DETIENE EL DETERIORO de los alimentos a causa de los microorganismos y bacterias pero, ¡OJO!, no los corrige.
- Si rompemos la CADENA DEL FRÍO la textura, el sabor y los nutrientes pueden irse al garete.
- Las FLUCTUACIONES TÉRMICAS serán un factor que debemos vigilar.
- La forma correcta de descongelar es introduciendo el comestible en la nevera para evitar CAMBIOS BRUSCOS DE TEMPERATURA.
- Debemos SEPARAR la comida según su tipo para evitar las contaminaciones cruzadas ( las carnes con las carnes, el pescado con el pescado...).
- NO TODO debe ser congelado. Las verduras por ejemplo pierden gran parte del agua que poseen perdiendo así su consistencia típica.
Por lo tanto, debemos saber que no es malo congelar pero debemos seguir los pasos oportunos para no destrozar el alimento.
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